Cómo enfrentar al jefe para negociar un aumento

Pese a que usted sabe que se lo merece y que puede lograrlo, conoce lo agotador que puede resultar el momento de la negociación. Diez tips que lo ayudarán a elegir el mejor camino para enfrentar el duro "trance"
Un momento que seguramente es difícil de enfrentar en la oficina es el de gestionar un aumento de sueldo, por más merecido que el trabajador sepa que lo tiene.

A continuación, diez tips que lo ayudarán a mantener la compostura cuando llegue la hora de enfrentar el “trance”.

1- Usted sabe que es justo y razonable: antes de entrar sin autorización y pedir el aumento, haga una pequeña “investigación” acerca del nivel de los salarios en su área de trabajo.

Es importante que la compañía entienda su importancia en el presente de la empresa.

2- Sepa cómo lucir: para juntar información sobre su rango de salario, debe chequearlo y compararlo con los de otras empresas. Así como también contactarse con bolsas de trabajo, empresas de trabajo temporario y asociaciones de profesionales.

3- Prepárese: para ayudarse a calmar los nervios, pase algo de tiempo practicando una pequeña presentación sobre su performance (y practiquela frente a alguien de su confianza).

4- Haga un “auto test”: si no se encuentra en su mejor momento laboral, probablemente no sea el mejor momento de intentar un aumento.

Pero si, por el contrario, acaba de ganar un premio o le ofrecieron un trabajo en otro lugar, no habrá mejor momento que el presente.

5- Pregúntese dónde quiere estar: un detalle clave que deberá tener en claro en el caso de tener que decidir ante un nuevo trabajo es que deberá estar listo para irse, en el caso de que su jefe no esté dispuesto a pretender hacerlo quedar.

6- Sepa cuándo es muy temprano para preguntar: definitivamente deberá contar con un año mínimo de experiencia en la compañía antes de pedir un aumento.

Esperar a adquirir la suficiente experiencia y “relaciones” es indispensable.

7- Vaya de frente: tome la iniciativa para aprender nuevas habilidades y asumir responsabilidades sin que nadie se lo pida.

8- Ayúdese con una correcta apreciación de su performance: los jefes odian hacer eso, por lo que hágalo por él, especialmente si los salarios se encuentran en un período anual de “revisión”.

Escriba un memo o mail detallando sus logros durante el último año

9- Tenga un objetivo específico en mente: después de hacer un “estudio” de su situación, decida el porcentaje de aumento que considere razonable.

Hay pocas garabtías de que obtenga exactamente lo que pida, pero podrá obtener una gran claridad acerca de su situación, tras la conversación con su jefe.

10- Considere los beneficios de la negociación: quizá no alcance el incremento salarial en ese momento (en parte, quizá porque la “mejora” debería alcanzar a otros trabajadores).

Pero puede aprovechar para hablar acerca de otros temas de interés, como una semana extra de vacaciones, cursos y capacitaciones extra o teléfono celular libre por parte de la compañía.