La Cámara baja debatirá la creación de una empresa estatal de aguas

Además, un plenario de comisiones analizará la formación de AySA, la compañía que brindará el servicio. El aval legislativo cierra el capítulo de la salida de Suez de la Argentina

El oficialismo se dispone a dar un fuerte aval político la semana que viene en la Cámara de Diputados a la decisión del gobierno de rescindir la concesión de Aguas Argentinas y la creación de AySA, la empresa estatal que en el futuro brindará el servicio.

El Frente para la Victoria (FPV) diseñó una estrategia para respaldar legislativamente ambas decisiones del gobierno.

El Poder Ejecutivo emitió un decreto para rescindir la concesión que tenía la empresa francesa Suez por incumplimiento del contrato y la baja calidad del aguas provista a las poblaciones de Capital y Gran Buenos Aires.

El oficialismo planteará en la comisión bicameral de Seguimiento de las Privatizaciones, que actualmente preside el senador Gerardo Morales (UCR), que el miércoles se pronuncie sobre el dictamen.

Ocurra eso o no, ya que se cree que normativamente no sería necesario que mediara una ratificación parlamentaria explícita, el FPV está dispuesto de todos modos a tratarlo en el recinto el miércoles por la tarde sobre tablas.

Por otra parte, el mismo día el kirchnerismo convocará por la mañana un plenario de las comisiones de Obras Públicas y de Presupuesto para considerar el segundo decreto del PEN, que dispuso la creación de Aguas y Saneamiento Argentino (AySA), que reemplazará a Aguas Argentinas.

En este caso se trata de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que las comisiones -presididas por Edgardo Depetri (Obras Públicas) y Carlos Snopek (Presupuesto)- transformarían en un proyecto de ley al darle dictamen favorable.

El tratamiento en el recinto de la creación de AySA, que para hacerse sobre tablas requeriría contar con los dos tercios de los votos, podría quedar para las próximas semanas.

La rescisión del contrato de concesión con Suez que decidió la semana pasada el gobierno encontró un eco favorable en la mayor parte del arco político de la cámara baja.

María América González (ARI), quien actúa en la comisión de Seguimiento de las Privatizaciones, sostuvo que Aguas Argentinas era
"un manuel de incumplimientos", que nunca pagaron las multas impuestas ni realizó las obras comprometidas en el contrato.

A su vez, el presidente de la comisión de Obras Públicas de Diputados, Edgardo Depetri (FPV), puso de relieve la "falta de compromiso" de la empresa con respecto del servicio brindado y sostuvo que el Estado "debe recuperar un control más grande del recurso y sobre la prestación futura".

En igual sentido se pronunció la radical Liliana Bayonzo y el propio senador Morales, quien consideró que la rescisión que dispuso el gobierno se vio precipitada "por la fuerza de los hechos".

La decisión en la Cámara baja de dar un fuerte respaldo legislativo la semana que viene a la rescisión del contrato con el ex concesionario del servicio de agua en Capital y Gran Buenos Aires no sería acompañada por el Senado.

Ocurre que la cámara alta no planeaba reunirse esta semana, salvo que haya cambiado de opinión en las últimas horas.